El primer ministro israelí autorizó “ataques contundentes” luego de que Hamás entregara cadáveres mal identificados. Gaza reporta al menos nueve muertos y una frágil tregua en peligro.
Nuevos bombardeos tras acusaciones de ruptura de acuerdo
El 28 de octubre de 2025, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu ordenó al ejército reactivar ataques contundentes sobre la Franja de Gaza, acusando a Hamás de violar el cese al fuego e incumplir protocolos de entrega de restos de rehenes.
Según el comunicado oficial, la decisión fue adoptada tras consultas de seguridad, luego de que Hamás entregara restos del rehén Ofir Tzarfati, que Israel afirma ya habían sido recuperados previamente, lo cual constituye para Netanyahu una violación del acuerdo.
Los bombardeos se materializaron en las primeras horas del día: al menos nueve personas murieron en ataques sobre Gaza Ciudad (barrio de Sabra) y un vehículo blanco en Khan Younis. Varios distritos reportan sonidos de explosiones, fuego antitanque y operaciones con drones.
Contexto diplomático y riesgo de colapso del cese al fuego
Los ataques ocurren apenas semanas después de que un cese al fuego mediado por EE. UU. entró en vigor el 10 de octubre. Este acuerdo buscaba frenar el conflicto entre Israel y Hamás luego de meses de intensos enfrentamientos.
Israel acusa que Hamás disparó contra sus fuerzas en zonas bajo vigilancia israelí en el sur de Gaza como Rafah, y que además entregó restos incorrectos durante la devolución de rehenes, lo cual desencadenó la nueva oleada de violencia.
El vicepresidente estadounidense J.D. Vance declaró que el cese al fuego sigue siendo válido pese a los recientes ataques, aunque reconoció que puede enfrentar “pequeños enfrentamientos aquí y allá”.
Consecuencias humanitarias e interrogantes en Gaza
Los bombardeos han generado caos entre la población civil: defensores de derechos humanos advierten que los hospitales y zonas residenciales podrían ser alcanzados debido a la densidad urbana de Gaza.
La repentina escalada podría romper definitivamente la tregua, empujando a una nueva fase de combate intenso que aumente la crisis humanitaria. La entrega de restos mal identificados agrava la desconfianza entre las partes y debilita los canales de mediación internacional.
Para la comunidad internacional, la prueba es clara: si Israel responde con bombardeos generalizados, la tregua negociada podría colapsar. Si, por otro lado, se circunscribe a operaciones quirúrgicas, aún cabe la posibilidad de mantener el cese al fuego bajo supervisión.








