Fallece Dick Cheney, ex-vicepresidente de los Estados Unidos

Dick Cheney, exvicepresidente de Estados Unidos, durante un evento en Washington D.C.

El exvicepresidente de Estados Unidos Dick Cheney durante un evento en Washington D.C.
Foto: Gage Skidmore / Flickr

Cheney, de 84 años, murió el 3 de noviembre de 2025 a causa de complicaciones por neumonía y enfermedad cardíaca; su carrera política incluyó roles clave como vicepresidente (2001-2009), secretario de Defensa y jefe de gabinete de la Casa Blanca.

Vida y trayectoria pública

Dick Cheney nació el 30 de enero de 1941 en Lincoln, Nebraska, y se crió en Wyoming. Ingresó al servicio público en 1969 y alcanzó puestos relevantes: jefe de gabinete del presidente Gerald Ford, congresista por Wyoming, secretario de Defensa del presidente George H. W. Bush durante la Guerra del Golfo (1990-91) y finalmente vicepresidente bajo la administración de George W. Bush (2001-2009).

Durante sus dos mandatos como vicepresidente, Chen­­ey desempeñó un papel inusitadamente influyente: supervisó políticas de seguridad nacional tras los ataques del 11 de septiembre de 2001, participó en la decisión de invadir Iraq en 2003 y promovió la ampliación del poder ejecutivo estadounidense.

Su estilo directo y a veces polémico le granjeó tanto apoyo como críticas; su legado incluye tanto la reivindicación de la capacidad ejecutiva presidencial como temas controvertidos en materia de vigilancia y guerra antiterrorista.

Fallecimiento y causas oficiales

La familia de Chen­­ey informó que falleció en la noche del lunes 3 de noviembre de 2025 a los 84 años, en su residencia, a causa de complicaciones por neumonía junto con enfermedad cardíaca y vascular. Durante décadas, había enfrentado problemas de salud graves, incluidos varios infartos y un trasplante de corazón en 2012.

La declaración oficial expresó que estuvo acompañado por su esposa Lynne y sus hijas Liz y Mary, en un testimonio de cercanía familiar en sus últimos días.

El fallecimiento de Cheney cierra una larga etapa de acción política pública que abarcó más de cuatro décadas y deja una huella tan profunda como controvertida en la historia de la política estadounidense contemporánea.

Legado y evaluación institucional

El legado de Dick Cheney será objeto de análisis prolongado: por un lado, se le reconoce como uno de los vicepre­sidentes más poderosos de la historia estadounidense, al redefinir ese cargo como un asiento de toma de decisiones estratégicas. Por otro lado, su impulso a la invasión de Iraq —basada en vínculos no demostrados entre Saddam Hussein y el 11-S— y sus políticas de vigilancia generaron cuestionamientos éticos y legales internacionales.

Desde una perspectiva institucional, su paso por el cargo marcó el aumento del perfil del poder ejecutivo, la centralización de la política exterior y de seguridad, y evidenció los desafíos para la rendición de cuentas en momentos de crisis.

En definitiva, Cheney deja un legado de gran complejidad: fue arquitecto de decisiones trascendentes, defensor del estado de seguridad, al mismo tiempo que figura que generó debates sobre límites del poder. Su vida cierra ahora con su muerte, pero su influencia permanecerá como parte del panorama político internacional de este siglo.