Guns N’ Roses electriza Bogotá con una noche histórica en el Vive Claro

El guitarrista Slash durante una presentación en vivo ante el público, como parte de la gira latinoamericana de Guns N’ Roses.
La legendaria banda estadounidense ofreció un espectáculo de dos horas el 7 de octubre ante miles de fanáticos, resaltando clásicos, energía intacta y producción impecable.

Inicio potente y repertorio emblemático

El concierto de Guns N’ Roses en Bogotá comenzó aproximadamente a las 7:40 p.m., en el recientemente inaugurado recinto Vive Claro. La banda, parte de su gira “Because What You Want & What You Get Are Two Completely Different Things”, saludó a un público ansioso y logró una conexión rápida.

El setlist incluyó una mezcla magistral de clásicos del rock —como “Sweet Child O’ Mine”, “Welcome to the Jungle”, y “November Rain”— junto a temas más recientes. Según registros de setlist.fm, el espectáculo tuvo momentos de intensidad variable, mostrando la versatilidad de la agrupación en escena.

Los músicos —Axl Rose, Slash y Duff McKagan— desplegaron una presencia sólida: Rose mantuvo su registro vocal, Slash ofreció solos electrizantes y McKagan firmó una base rítmica potente. La producción incluyó iluminación sincronizada, pirotecnia controlada y pantallas LED que proyectaron imágenes alusivas a las canciones.

Ambiente, público y logística del evento

El Vive Claro, con capacidad aproximada para 40.000 asistentes, recibió a una multitud diversa. Fanáticos de distintas generaciones convergieron bajo una atmósfera de expectación y celebración del rock.

La apertura de puertas desde la tarde permitió que el público ingresara con calma. Se implementaron controles de seguridad, acceso escalonado y rutas de evacuación bien señalizadas. Aun así, algunos asistentes reportaron demoras moderadas al ingreso debido a rigurosos controles de acceso.

Durante el show, el público respondió con entusiasmo, coreando fragmentos completos de los temas más emblemáticos. En momentos emotivos, como el final con “Paradise City”, se observó una comunión entre banda y audiencia.

No se registraron incidentes mayores, más allá de interacciones espontáneas en zonas de gradería. Las autoridades locales dispusieron presencia policial en perímetros y se mantuvo un plan de contingencia ante posibles eventualidades.

Significado cultural y legado del concierto

Este concierto marca un hito: no solo por traer a una de las bandas más icónicas del rock al nuevo escenario Vive Claro, sino por consolidar la apuesta de Bogotá como ciudad anfitriona de espectáculos de gran escala.

Para muchos seguidores colombianos, fue una noche de reafirmación: volver a ver a sus ídolos con energía intacta evoca nostalgia, pero también renueva la vigencia del rock en un contexto cultural contemporáneo.

Desde el punto de vista del mercado de entretenimiento, el evento refuerza la viabilidad de recintos como Vive Claro y demuestra que, con apoyo técnico, regulatorio y logístico eficiente, la ciudad puede recibir giras internacionales exigentes.

A futuro, este tipo de conciertos puede incentivar inversiones en infraestructura musical, fortalecer la industria local y generar más demanda de espectáculos de gran calibre. La presentación de ayer no fue simplemente un concierto: fue un momento de celebración colectiva, reafirmación artística y señal de que el rock sigue vivo en Bogotá.